A continuación la transcripción de la lectura, de la que desconozco el autor.
Refieren las crónicas que en 1994 se celebró una
competencia de remo entre Japón y México. Los remeros japoneses se destacaron
desde el comienzo. Llegaron a la meta una hora antes que el equipo mexicano. De regreso en México, el comité ejecutivo se
reunió para analizar las causas de tan desconcertante e imprevisto resultado. Las
conclusiones fueron:
1) En el equipo japonés había un jefe de equipo y 10
remeros
2) En el equipo mexicano había un remero y 10 jefes
Imagen Original de Quino |
La decisión pasó a la esfera de planificación estratégica
para el próximo evento, con una reestructuración que calaría en lo más profundo
a la delegación.
En 1995, producida la largada de la nueva competencia, el
equipo japonés volvió a adelantarse desde el comienzo. Esta vez el equipo
mexicano arribó a la meta dos horas más
tarde. El nuevo análisis del Comité Ejecutivo arrojó los siguientes resultados:
1) El equipo japonés había un jefe y 10 remeros.
2) En el equipo mexicano, luego de los cambios
introducidos por el departamento de Panificación Estratégica, la composición
era la siguiente:
- Un jefe de equipo
- Dos Asistentes al Jefe
- Siete Jefes de Sección
- Un remero.
La conclusión del comité fue unánime y lapidaria: ¨El
remero es un incompetente¨
En 1996 se les presentó una nueva oportunidad al equipo
mexicano. El Departamento de Nuevas Tecnologías y Negocios había puesto en
marcha un plan destinado a mejorar la productividad, introduciendo novedosas modificaciones
en la organización que generaría, sin lugar a dudas, incrementos substanciales
de efectividad, eficiencia y eficacia. Sería la llave del éxito, el broche de
oro de un trabajo que humillaría al mismísimo Peter Drucker.
El resultado fue catastrófico. El equipo mexicano llegó
tres horas más tarde que el japonés. Las conclusiones revelaron datos escalofriantes:
1) Para desconcertar el equipo japonés optó por la
alineación tradicional: Un jefe y 10
remeros
2) El equipo mexicano utilizó una novedosa formación
vanguardista, integrada por :
- Un jefe de equipo
- Dos auditores de Calidad Total
- Un asesor de Empowerment
- Un supervisor de downsizing
- Un analista de procedimientos
- Un tecnólogo
- Un contralor
- Un experto en Coaching
- Un apuntador de tiempo
- Un remero.
Luego de varios días de agotadoras reuniones y profundo análisis
(tipo el Congreso para la autorización de la nueva miscelánea fiscal) el comité
decidió castigar al remero quitándole ¨todos los bonos e incentivos por el fracaso
alcanzado¨.
En la reunión de cierre, el comité junto con los
accionistas representativos, concluyeron: ¨Recurriremos a la contratación de un
nuevo remero, pero a través de un contrato de outsourcing, con el objeto de no
tener que lidiar con el sindicato y no estar atado a convenios laborales anquilosados,
que sin duda, degradan la eficiencia y productividad de los recursos¨.
De la anterior historia se desprenden tres moralejas:
- NO hay justicia en los juegos (ya nos tocaba, por participar siempre)
- Los Japoneses usan anabólicos
- El remero era reactivo en lugar de ser proactivo.
- El remero era flojo y no se apegó a la misión, visión, estrategias y tácticas del sistema y por si fuera poco NO supo Trabajar en Equipo.